Esta semana, Google ha presentado sus últimos avances en inteligencia artificial: la función Duplex. El asistente de Google, que funciona muy dignamente en terminales como el Pixel 2, ya es capaz de pedirte cita en el callista o de encargar una pizza de piña para la cena para que no tengas que pasar bochorno en el proceso.
Las posibilidades aumentan exponencialmente cuando se coge ese poder de computación y se aplica a un hardware adecuado, como los roboses de Boston Dynamics (gracias, Miki). Hace unos meses, pasamos mucho miedo viendo como los Spotmini, los robots cuadrúpedos de la empresa tecnológica, sabÃan abrir puertas dejando sin escondite a toda la especie humana.
La otra estrella de Boston Dynamics, Atlas, es capaz de correr con este gracejo y de, incluso, dar saltos mortales para solaz de los churumbeles de la casa. FEDOR es un robot ruso capaz de usar armas de fuego con las dos manos, como los vaqueros que hacÃan de malos en los westerns de los sábados a la hora de la sobremesa.
Lo bueno de esto es cómo cualquiera puede darle al coco y ser 100tÃfiko. Como el fulano al que se le ocurrió que podÃamos deshacernos de la basura del planeta arrojándola a volcanes activos.
Vale que, como explica Popular Science, no todos los volcanes son asà de amables y están esperando a que nos asomemos al borde para sentir el refulgir del calor de la Tierra.
Vale que, cuando arrojas materia a un volcán, el bicho se pone a explotar y a cabrearse como si supiera que has venido a joderle. Vale que los gases de la combustión de toda esa basura contaminan la atmósfera. Vale que es una mala idea, ¿pero no molarÃa?
Bueno, estas son las cosas que pasan fuera de España, donde los cientÃficos son aficionados o de pacotilla. AquÃ, como dijo el ministro de EconomÃa Román Escolano, «llevamos oyendo que la ciencia se muere en España muchos años. Y la ciencia en España está vibrante».
Las cosas de la ciencia que sà interesan son, por ejemplo, cómo podÃan tener ese pelazo todas las estrellas de metal sueco de los años 80. ¡Cómo! ¿Es posible encontrar hoy en dÃa en YouTube un vÃdeo con mayor calidad capilar que el de Give a helpin’ hand, el We are the world sueco?
Esta semana, Google ha presentado sus últimos avances en inteligencia artificial: la función Duplex. El asistente de Google, que funciona muy dignamente en terminales como el Pixel 2, ya es capaz de pedirte cita en el callista o de encargar una pizza de piña para la cena para que no tengas que pasar bochorno en el proceso.
Las posibilidades aumentan exponencialmente cuando se coge ese poder de computación y se aplica a un hardware adecuado, como los roboses de Boston Dynamics (gracias, Miki). Hace unos meses, pasamos mucho miedo viendo como los Spotmini, los robots cuadrúpedos de la empresa tecnológica, sabÃan abrir puertas dejando sin escondite a toda la especie humana.
La otra estrella de Boston Dynamics, Atlas, es capaz de correr con este gracejo y de, incluso, dar saltos mortales para solaz de los churumbeles de la casa. FEDOR es un robot ruso capaz de usar armas de fuego con las dos manos, como los vaqueros que hacÃan de malos en los westerns de los sábados a la hora de la sobremesa.
Lo bueno de esto es cómo cualquiera puede darle al coco y ser 100tÃfiko. Como el fulano al que se le ocurrió que podÃamos deshacernos de la basura del planeta arrojándola a volcanes activos.
Vale que, como explica Popular Science, no todos los volcanes son asà de amables y están esperando a que nos asomemos al borde para sentir el refulgir del calor de la Tierra.
Vale que, cuando arrojas materia a un volcán, el bicho se pone a explotar y a cabrearse como si supiera que has venido a joderle. Vale que los gases de la combustión de toda esa basura contaminan la atmósfera. Vale que es una mala idea, ¿pero no molarÃa?
Bueno, estas son las cosas que pasan fuera de España, donde los cientÃficos son aficionados o de pacotilla. AquÃ, como dijo el ministro de EconomÃa Román Escolano, «llevamos oyendo que la ciencia se muere en España muchos años. Y la ciencia en España está vibrante».
Las cosas de la ciencia que sà interesan son, por ejemplo, cómo podÃan tener ese pelazo todas las estrellas de metal sueco de los años 80. ¡Cómo! ¿Es posible encontrar hoy en dÃa en YouTube un vÃdeo con mayor calidad capilar que el de Give a helpin’ hand, el We are the world sueco?