29 de abril 2020    /   CREATIVIDAD
por
 

ChildrenforCovid19: ¿Y si los niños encuentran la solución a la pandemia?

29 de abril 2020    /   CREATIVIDAD     por          
CompƔrtelo twitter facebook whatsapp
thumb image

”Yorokobu gratis en formato digital!

Lee gratis la revista Junio/JulioĀ haciendo clic aquĆ­.

El jabón es la kriptonita del coronavirus. ¿Y si para acabar con él todos nos pusiéramos a hacer pompas de jabón? Es la idea que Carla, de 6 años, compartió en ChildreforCovid19.com.

La web lleva ya mÔs de 200 contribuciones similares a la suya. Todas de niños de entre 6 y 14 años. «La media es de unos 8 años», afirma Pep Torres, promotor de esta web creada para recabar las propuestas de los escolares para acabar con el coronavirus.

La plataforma, dice Torres, se estructura en dos partes que ni el señor Miyagi podría resumir mejor: «dar ideas y ver ideas». «En la primera, se recogen las ideas de los niños. Estos solo tienen que dejar su nombre, edad y ciudad. No necesitamos mÔs datos».

La segunda estĆ” pensada para ser consultada por los profesionales que estĆ”n trabajando para erradicar la pandemia desde primera lĆ­nea. Ā«El objetivo es que las lean, porque quizĆ”s alguna pueda provocar el efecto ā€œĀ”ajĆ”!ā€ y, a partir de ella, surja una idea que pueda convertirse en soluciónĀ».

Para el inventor, conferenciante y  CEO de Stereonoise, la mirada de un niño puede aportar perspectivas distintas desde las que afrontar un problema de difícil solución. «Esta es una crisis en la que se estÔ trabajando desde diversos Ômbitos. Pero siempre desde la mentalidad del adulto. ¿Y si los niños proponen soluciones que sirvan de inspiración?».

Se trata de librarse de los prejuicios que envuelven las opiniones adultas y que tanto las condicionan. «Comparto al 100% esa frase que dice que los creativos son niños que se han salvado». De hecho, él siempre se ha considerado un poco niño. «Por eso me ha costado tener voz en determinados ambientes profesionales », confiesa.

«Un creativo con sentido del humor estÔ sentenciado de entrada. Para ser profesional parece que tienes que tener cara de mala hostia, y olvídate de hacer un chiste». Lo bueno, cree, es que este perfil se estÔ valorando cada vez mÔs en todos los Ômbitos.

Para Torres, las propuestas de los niños no estÔn encorsetadas por el factor tiempo. «Es lógico que a los mayores nos preocupe el corto plazo. Que pensemos qué pasara con nuestros empleos, nuestros negocios, cuando acabe todo esto». De hecho, Torres se recrea con la justicia poética que se produciría en el caso de que una de estas ideas infantiles sirviese de base para la solución final de un problema que, mucho teme, serÔ recurrente: «Al final, son ellos los que van a heredar este mundo».

Para que todo eso sea posible, ChildrenforCovid19 trabaja para afianzar la tercera pata del proyecto: la de formar un grupo de expertos encargado de hacer una criba entre todas las ideas recibidas. «Se trata de profesionales autorizados (médicos, científicos, etc.) que repasan las ideas de los niños para rescatar aquellas que, quizÔs, dÔndoles una vuelta, se podrían desarrollar. De esta forma, los expertos que mÔs tarde consulten las propuestas podrían ir directamente a aquellas que ya han sido valoradas por estos profesionales».

Un filtro que hubiera venido de perlas a Donald Trump  para evitar el estupor de sus asesores y del mundo entero ante sus inverosímiles y tóxicas propuestas para combatir el virus.

Para Pep Torres, lo de encontrar genialidades entre las propuestas infantiles no es nuevo. «Cuando era director de MIBA(Museo de Ideas e Inventos de Barcelona) teníamos un concurso de ideas entre niños, y algunas eran excepcionales». En una ocasión, de hecho, participaron en The British Invention Show, de Londres, con algunas de ellas. Y en la categoría adultos: «Y varias ganaron».

Por eso, cuando el inventor lanzó la idea, pronto se le sumaron otros muchos amigos, como Mind The Gap, que creó la pÔgina, o el festival El Chupete, en la parte creativa, entre otros.

Torres considera a ChildrenforCovid19, ademÔs, como una suerte de caja de emociones infantiles: «Es una función muy relevante también porque les ofrecemos un sitio donde expresarse, donde mostrar cómo se sienten con toda esta situación. Hay algunos que hacen mucho hincapié en lo de lavarse las manos; otros, en no salir a la calle, lo que demuestra también sus miedos. Tal vez, con el tiempo, la web se convierta en una especie de diario en el que se nos muestre cómo se vivió esta etapa entre los mÔs pequeños», concluye.

”Yorokobu gratis en formato digital!

Lee gratis la revista Junio/JulioĀ haciendo clic aquĆ­.

El jabón es la kriptonita del coronavirus. ¿Y si para acabar con él todos nos pusiéramos a hacer pompas de jabón? Es la idea que Carla, de 6 años, compartió en ChildreforCovid19.com.

La web lleva ya mÔs de 200 contribuciones similares a la suya. Todas de niños de entre 6 y 14 años. «La media es de unos 8 años», afirma Pep Torres, promotor de esta web creada para recabar las propuestas de los escolares para acabar con el coronavirus.

La plataforma, dice Torres, se estructura en dos partes que ni el señor Miyagi podría resumir mejor: «dar ideas y ver ideas». «En la primera, se recogen las ideas de los niños. Estos solo tienen que dejar su nombre, edad y ciudad. No necesitamos mÔs datos».

La segunda estĆ” pensada para ser consultada por los profesionales que estĆ”n trabajando para erradicar la pandemia desde primera lĆ­nea. Ā«El objetivo es que las lean, porque quizĆ”s alguna pueda provocar el efecto ā€œĀ”ajĆ”!ā€ y, a partir de ella, surja una idea que pueda convertirse en soluciónĀ».

Para el inventor, conferenciante y  CEO de Stereonoise, la mirada de un niño puede aportar perspectivas distintas desde las que afrontar un problema de difícil solución. «Esta es una crisis en la que se estÔ trabajando desde diversos Ômbitos. Pero siempre desde la mentalidad del adulto. ¿Y si los niños proponen soluciones que sirvan de inspiración?».

Se trata de librarse de los prejuicios que envuelven las opiniones adultas y que tanto las condicionan. «Comparto al 100% esa frase que dice que los creativos son niños que se han salvado». De hecho, él siempre se ha considerado un poco niño. «Por eso me ha costado tener voz en determinados ambientes profesionales », confiesa.

«Un creativo con sentido del humor estÔ sentenciado de entrada. Para ser profesional parece que tienes que tener cara de mala hostia, y olvídate de hacer un chiste». Lo bueno, cree, es que este perfil se estÔ valorando cada vez mÔs en todos los Ômbitos.

Para Torres, las propuestas de los niños no estÔn encorsetadas por el factor tiempo. «Es lógico que a los mayores nos preocupe el corto plazo. Que pensemos qué pasara con nuestros empleos, nuestros negocios, cuando acabe todo esto». De hecho, Torres se recrea con la justicia poética que se produciría en el caso de que una de estas ideas infantiles sirviese de base para la solución final de un problema que, mucho teme, serÔ recurrente: «Al final, son ellos los que van a heredar este mundo».

Para que todo eso sea posible, ChildrenforCovid19 trabaja para afianzar la tercera pata del proyecto: la de formar un grupo de expertos encargado de hacer una criba entre todas las ideas recibidas. «Se trata de profesionales autorizados (médicos, científicos, etc.) que repasan las ideas de los niños para rescatar aquellas que, quizÔs, dÔndoles una vuelta, se podrían desarrollar. De esta forma, los expertos que mÔs tarde consulten las propuestas podrían ir directamente a aquellas que ya han sido valoradas por estos profesionales».

Un filtro que hubiera venido de perlas a Donald Trump  para evitar el estupor de sus asesores y del mundo entero ante sus inverosímiles y tóxicas propuestas para combatir el virus.

Para Pep Torres, lo de encontrar genialidades entre las propuestas infantiles no es nuevo. «Cuando era director de MIBA(Museo de Ideas e Inventos de Barcelona) teníamos un concurso de ideas entre niños, y algunas eran excepcionales». En una ocasión, de hecho, participaron en The British Invention Show, de Londres, con algunas de ellas. Y en la categoría adultos: «Y varias ganaron».

Por eso, cuando el inventor lanzó la idea, pronto se le sumaron otros muchos amigos, como Mind The Gap, que creó la pÔgina, o el festival El Chupete, en la parte creativa, entre otros.

Torres considera a ChildrenforCovid19, ademÔs, como una suerte de caja de emociones infantiles: «Es una función muy relevante también porque les ofrecemos un sitio donde expresarse, donde mostrar cómo se sienten con toda esta situación. Hay algunos que hacen mucho hincapié en lo de lavarse las manos; otros, en no salir a la calle, lo que demuestra también sus miedos. Tal vez, con el tiempo, la web se convierta en una especie de diario en el que se nos muestre cómo se vivió esta etapa entre los mÔs pequeños», concluye.

CompƔrtelo twitter facebook whatsapp
Libritos Jenkins: cultura popular con grapas
Bere Casillas: el sastre 2.0
Imaginawesome, ilustraciones infantiles pasadas por el filtro de un adulto
¿Recuerdos indeseables? ”Al Museo de Relaciones Rotas!
 
Especiales
 
facebook twitter whatsapp