Pero cuando la ciudadanÃa se entera de que en 14 años de operaciones en Reino Unido, con una facturación de 3.000 millones de libras esterlinas, Starbucks solo ha pagado 8.6 millones de libras esterlinas en impuesto de sociedades, no hay argumento que valga para apaciguar unos ánimos caldeados por la austeridad y la crisis.
En respuesta al furor ciudadano, la cadena ha prometido pagar 20 millones de esterlinas en impuestos en los próximos dos años. Una medida calculada para tranquilizar la creciente utilización de la palabra ‘boicot’ cada vez que se nombra la marca.
El problema es que, hasta que esta ley se apruebe, va a pasar por muchas deliberaciones y conociendo los precedentes de este tipo de regulación, los lobbies empresariales harán todo lo posible para que en el momento en que llegue la votación haya tantas enmiendas que existirán mil y una formas de evitar pagar lo que realmente corresponde.
Hablas con cualquier persona que trabaja en bolsa o en el sector financiero y te dan los mismos argumentos de siempre. Starbucks está haciendo las cosas bien. Su trabajo es maximizar el valor para el accionista y una de las claves es pagar cuantas menos tasas posibles.
Quizá el debate de que hay que subir los impuestos a los ricos como se está proponiendo en Francia sea una distracción innecesaria. ¿No bastarÃa que cada uno pagara lo que legalmente le corresponde sin resquicios raros ni fórmulas opacas para evadir su pago? Un sistema claro y transparente.
Pero serÃa naive pensar que el caso Starbucks cambiará las cosas. El anuncio apenas ha afectado su valor en bolsa. Los inversores se han quedado satisfechos por las medidas. “Están evitando un boicot. Es solo el precio de hacer negocios”, declaró Nell Minow de GMI Ratings al Financial Times. En otras palabras, el pago es simplemente un peaje que tienen que pagar. Mientras tanto, business as usual.
Pero cuando la ciudadanÃa se entera de que en 14 años de operaciones en Reino Unido, con una facturación de 3.000 millones de libras esterlinas, Starbucks solo ha pagado 8.6 millones de libras esterlinas en impuesto de sociedades, no hay argumento que valga para apaciguar unos ánimos caldeados por la austeridad y la crisis.
En respuesta al furor ciudadano, la cadena ha prometido pagar 20 millones de esterlinas en impuestos en los próximos dos años. Una medida calculada para tranquilizar la creciente utilización de la palabra ‘boicot’ cada vez que se nombra la marca.
El problema es que, hasta que esta ley se apruebe, va a pasar por muchas deliberaciones y conociendo los precedentes de este tipo de regulación, los lobbies empresariales harán todo lo posible para que en el momento en que llegue la votación haya tantas enmiendas que existirán mil y una formas de evitar pagar lo que realmente corresponde.
Hablas con cualquier persona que trabaja en bolsa o en el sector financiero y te dan los mismos argumentos de siempre. Starbucks está haciendo las cosas bien. Su trabajo es maximizar el valor para el accionista y una de las claves es pagar cuantas menos tasas posibles.
Quizá el debate de que hay que subir los impuestos a los ricos como se está proponiendo en Francia sea una distracción innecesaria. ¿No bastarÃa que cada uno pagara lo que legalmente le corresponde sin resquicios raros ni fórmulas opacas para evadir su pago? Un sistema claro y transparente.
Pero serÃa naive pensar que el caso Starbucks cambiará las cosas. El anuncio apenas ha afectado su valor en bolsa. Los inversores se han quedado satisfechos por las medidas. “Están evitando un boicot. Es solo el precio de hacer negocios”, declaró Nell Minow de GMI Ratings al Financial Times. En otras palabras, el pago es simplemente un peaje que tienen que pagar. Mientras tanto, business as usual.
Da igual las leyes que pongan, quien tenga dinero encontrara la forma de pagar impuestos y, ademas, de forma legal (aunque puede que no etica). Si encima el precio de las acciones, de una empresa que no paga impuestos, no baja, probablemente porque a la gente le da igual o se cree lo que la empresa le cuenta, dificil solucion tiene.
Da igual las leyes que pongan, quien tenga dinero encontrara la forma de pagar impuestos y, ademas, de forma legal (aunque puede que no etica). Si encima el precio de las acciones, de una empresa que no paga impuestos, no baja, probablemente porque a la gente le da igual o se cree lo que la empresa le cuenta, dificil solucion tiene.
Los consumidores parecemos hipnotizados por las grandes marcas.
Todas practican ese modelo de evasión (legal pero anti ético), además tóxico para la sociedad, sacan del paÃs un dinero que esencial para la supervivencia de nuestro modelo social.
Naturalmente mientras tanto los polÃticos mira hacia otro lado.
BOICOT, esa es la única palabra a la que temen.
Y nada más sencillo de hacer por parte de los consumidores, no comprar esas marcas, ni Apple, ni Microsoft, ni Nike, todas las corporaciones supranacionales lo practican.
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