El Museo del Louvre es una de las pinacotecas más importantes del mundo. En su colección se encuentran la Gioconda y la victoria de Samotracia que, aunque no es un bólido de carreras, no está nada mal. Además, el museo francés puede enorgullecerse de haber servido de inspiración para El HematocrÃtico del Arte.
«Durante un viaje a ParÃs, de visita en el Louvre, me encontré con San Jerónimo penitente en éxtasis, atribuido a Luca Signorelli. Estaba etiquetado con el tÃtulo original, en italiano, y la traducción al francés. De esa pequeña epifanÃa vino la idea de crear un blog», recuerda el propio HematocrÃtico.


Al acabar su visita a la pinacoteca francesa, este «señor coruñés que se está tomando en serio hacer un poquito de todo» —como lo define la hoja de prensa que acompaña al libro El HematocrÃtico del Ar-Tres—, habÃa fotografiado un montón de cuadros. Una cosecha suficiente como para alimentar durante meses un blog que estaba a punto de nacer. «Fue en verano del 2011. Abrà el Tumblr cuando regresé del viaje, creo que incluso antes que las maletas».
Rápidamente, el blog de El HematocrÃtico tuvo una gran aceptación. Un éxito que no pasó desapercibido a la editorial ¡Caramba!, que publicó un volumen recopilatorio. Poco después salÃa un segundo. Apenas hace unos dÃas, ha visto la luz un tercero.


El éxito ha sido tal que no tardaron en salir imitadores que intentaron repetir una fórmula con resultados sonrojantes. Lo que ellos consideraban una labor sencilla, resultó más complicada de lo que parecÃa.
«Supongo que la clave está en no tener ninguna pretensión, más allá de la de hacer reÃr. El proceso de poner un tÃtulo es automático. Si no me viene a la cabeza una broma a la primera, descarto el cuadro. Creo que eso es lo que las hace sorprendentes y frescas», cuenta.
Antes El HematocrÃtico tenÃa una carpeta donde guardaba aquellos cuadros que no tenÃan tÃtulo pero que prometÃan. «Sin embargo, descubrà pronto que si no me salÃa a la primera, nunca saldrÃa. Por otra parte, hay cuadros tan locos que no se pueden poner ni tÃtulo. Por ejemplo estos tres que te adjunto. ¿Cómo titular… ESTO?».

Las obras que componen El HematocrÃtico del Arte proceden de fuentes muy diversas. Desde blogs y Tumblrs a webs de museos o galerÃas de arte. «No tengo ningún periodo favorito, pero el arte medieval italiano me da satisfacciones sin parar», explica HematocrÃtico que, de modo casi inconsciente, se ha centrado exclusivamente en la pintura. «Es que nunca he encontrado una escultura que me hiciera gracia…», confiesa. «Bueno, ninguna salvo esta». Ahà la tienen.

Como sucede con muchas sagas literarias, con el mejor cine o con las series de televisión más populares, El HematocrÃtico del Arte también tiene su propio spin off: A-Cero Azul. Este blog, cuyo mecanismo es semejante al del arte, tiene como protagonista al arquitecto JoaquÃn Torres, que también es una pieza interesante.
«Una vez descubrà que lo único que se podÃa comparar con la totalidad de la historia del arte universal como fuente de inspiración, eran los looks de JoaquÃn Torres. A-Cero Azul ha desaparecido porque JoaquÃn cerró su blog La Percha de JoaquÃn. No solo lo cerró. Lo destruyó, lo borró del mapa. Gracias a Dios que existe A-cero azul. Si no, habrÃamos perdido todas esas fotografÃas para siempre. Es un precio que no nos habrÃamos podido permitir».
Efectivamente. Una visita a A-cero azul demuestra que la destrucción de ese blog es una pérdida para la humanidad comparable a la de los Budas de Afganistán o a la de Palmira. Gracias, HematocrÃtico.



