15 de marzo 2012    /   IDEAS
por
 

En el Ojo Ajeno: Elige tu modo de vida perfecto

15 de marzo 2012    /   IDEAS     por          
Compártelo twitter facebook whatsapp
thumb image

¿Qué te gustaría hacer para vivir? ¿Cómo sería tu esquema laboral ideal, si fueras dueño de tu tiempo? La respuesta no es fácil. Ya he hecho la prueba. He ido preguntando de sopetón y en general nadie contesta con soltura. ¿Por qué? He elaborado una utopía al respecto en toda regla (para pasar el rato) y una receta.

La tendencia generalizada (o sea 3 de los 4 a los que he encuestado) es la del mínimo esfuerzo. A la tentación de dar con la idea chollo que con poco esfuerzo te arregle el mes. El resto de la muestra (Javier) se decantó por una primitiva. Pero supongamos que vamos en serio y somos gente comprometida y que realmente ponemos encima de la mesa un compromiso y un esfuerzo real. Reseteo a la base muestral y les pido que vuelvan a pensarlo. ¿Cómo te gustaría ganarte la vida?

Algunas respuestas fueron: “Me encantaría que las empresas me contrataran por proyectos de los que a mí me gusta hacer, no como parte de su estructura como ahora”. No está mal.  “Me gustaría prepararme más y pasar a limpio la cantidad de ideas que se me ocurren a lo largo del día, y venderlas.”. “Me gustaría hacer muchas cosas en lugar de estar 8 horas pensando en lo mismo.” Interesante. ¿Por qué  hacer una sola cosa?

Lo que parecía claro es que la inmensa mayoría (los 4)  intentarían romper con un esquema fijo de trabajo. El modelo tradicional y actual de empresa exige disciplina laboral, gestión de personal, funciones, estructuras. Maquinaria en definitiva. Y eso repele. Interesante también: ¿Cuánto esfuerzo dedica una empresa a gestionarse a sí misma respecto a desarrollar proyectos?

En cuestión de minutos el estudio pronto derivó en otros temas, campañas, fútbol, impuestos… también con interesantísimas conclusiones que me guardo para otro día.

Y la utopía que sale de todo esto es: ¿Sería posible un modo de vida  en que una persona fuera 3 horas a una gestoría, diseñara maquetas de aviones para Tamiya, condujera camiones de mudanzas y fuera profesor de francés? Al fin y al cabo es solo un tema de gestión.

Hoy todos tenemos herramientas para gestionar y gestionarnos. Cualquier profesional tiene resortes para avanzar proyectos en lo suyo. Ahí residirá el mérito de cada uno y su éxito: en su capacidad real de hacer cosas y el esfuerzo que le pusiera. Si eso fuera posible sería una competición justa. Lo que asusta en realidad de eso es el formato laboral y fiscal…

Hoy existen redes que permiten controlar las relaciones de una persona con 500 amigos, y a éstos con otros 500 en tiempo real. Existen medios de pago de todo tipo. Hacienda recibe datos fiscales de cada euro que te gastas. Un radar te pilla en Valladolid y en unos meses te quitan el dinero de tu banco. ¿De verdad  estamos tan lejos de tener plataformas que permitan gestiones y relaciones profesionales entre personas de forma inmediata?

¿Y si todo eso fuera gestionable de forma sencilla? Seguramente comprobaríamos que el mundo se mueve mucho más por tareas que por proyectos. Y por tanto habría gente encantada de moverse a ese nivel. Y no debería ser pecado ser un ideólogo profesional, promiscuo, multitarea y multiempleado.

Cada vez más actuamos de forma autónoma y atomizada, pero el sistema solo está preparado para pagar consumo, no trabajo. Con tu Visa puedes pagar dos botellas de aceite pero no un informe que encargues a un amigo. Ni pagar al vecino cada mañana para que te traiga el periódico con una barra de pan. Solo se trataría de juntar ideas y necesidades que hoy están en planos distintos. Empresa y persona.

Lo sé, lo que acabo de exponer es de una simpleza intelectual descomunal…pero he avisado que era utópico y para pasar el rato.

Y por último la receta. Una nueva versión de idealista.com. (es tan iluso que solo puede llamarse así) que se encargara de atar cabos: lo que a unos le gustaría hacer con lo que otros necesitan. De forma legal y fiscalmente viable.

P.D: Mensaje para el dueño de Idealista. Estimado Jesús Encinar: Aquí tienes tu nuevo proyecto. Arréglale la vida a mi base muestral de 4 amigos.

Foto: Dan Brady bajo licencia CC

¿Qué te gustaría hacer para vivir? ¿Cómo sería tu esquema laboral ideal, si fueras dueño de tu tiempo? La respuesta no es fácil. Ya he hecho la prueba. He ido preguntando de sopetón y en general nadie contesta con soltura. ¿Por qué? He elaborado una utopía al respecto en toda regla (para pasar el rato) y una receta.

La tendencia generalizada (o sea 3 de los 4 a los que he encuestado) es la del mínimo esfuerzo. A la tentación de dar con la idea chollo que con poco esfuerzo te arregle el mes. El resto de la muestra (Javier) se decantó por una primitiva. Pero supongamos que vamos en serio y somos gente comprometida y que realmente ponemos encima de la mesa un compromiso y un esfuerzo real. Reseteo a la base muestral y les pido que vuelvan a pensarlo. ¿Cómo te gustaría ganarte la vida?

Algunas respuestas fueron: “Me encantaría que las empresas me contrataran por proyectos de los que a mí me gusta hacer, no como parte de su estructura como ahora”. No está mal.  “Me gustaría prepararme más y pasar a limpio la cantidad de ideas que se me ocurren a lo largo del día, y venderlas.”. “Me gustaría hacer muchas cosas en lugar de estar 8 horas pensando en lo mismo.” Interesante. ¿Por qué  hacer una sola cosa?

Lo que parecía claro es que la inmensa mayoría (los 4)  intentarían romper con un esquema fijo de trabajo. El modelo tradicional y actual de empresa exige disciplina laboral, gestión de personal, funciones, estructuras. Maquinaria en definitiva. Y eso repele. Interesante también: ¿Cuánto esfuerzo dedica una empresa a gestionarse a sí misma respecto a desarrollar proyectos?

En cuestión de minutos el estudio pronto derivó en otros temas, campañas, fútbol, impuestos… también con interesantísimas conclusiones que me guardo para otro día.

Y la utopía que sale de todo esto es: ¿Sería posible un modo de vida  en que una persona fuera 3 horas a una gestoría, diseñara maquetas de aviones para Tamiya, condujera camiones de mudanzas y fuera profesor de francés? Al fin y al cabo es solo un tema de gestión.

Hoy todos tenemos herramientas para gestionar y gestionarnos. Cualquier profesional tiene resortes para avanzar proyectos en lo suyo. Ahí residirá el mérito de cada uno y su éxito: en su capacidad real de hacer cosas y el esfuerzo que le pusiera. Si eso fuera posible sería una competición justa. Lo que asusta en realidad de eso es el formato laboral y fiscal…

Hoy existen redes que permiten controlar las relaciones de una persona con 500 amigos, y a éstos con otros 500 en tiempo real. Existen medios de pago de todo tipo. Hacienda recibe datos fiscales de cada euro que te gastas. Un radar te pilla en Valladolid y en unos meses te quitan el dinero de tu banco. ¿De verdad  estamos tan lejos de tener plataformas que permitan gestiones y relaciones profesionales entre personas de forma inmediata?

¿Y si todo eso fuera gestionable de forma sencilla? Seguramente comprobaríamos que el mundo se mueve mucho más por tareas que por proyectos. Y por tanto habría gente encantada de moverse a ese nivel. Y no debería ser pecado ser un ideólogo profesional, promiscuo, multitarea y multiempleado.

Cada vez más actuamos de forma autónoma y atomizada, pero el sistema solo está preparado para pagar consumo, no trabajo. Con tu Visa puedes pagar dos botellas de aceite pero no un informe que encargues a un amigo. Ni pagar al vecino cada mañana para que te traiga el periódico con una barra de pan. Solo se trataría de juntar ideas y necesidades que hoy están en planos distintos. Empresa y persona.

Lo sé, lo que acabo de exponer es de una simpleza intelectual descomunal…pero he avisado que era utópico y para pasar el rato.

Y por último la receta. Una nueva versión de idealista.com. (es tan iluso que solo puede llamarse así) que se encargara de atar cabos: lo que a unos le gustaría hacer con lo que otros necesitan. De forma legal y fiscalmente viable.

P.D: Mensaje para el dueño de Idealista. Estimado Jesús Encinar: Aquí tienes tu nuevo proyecto. Arréglale la vida a mi base muestral de 4 amigos.

Foto: Dan Brady bajo licencia CC

Compártelo twitter facebook whatsapp
¿Deben las máquinas desobedecernos?
El primer viaje en bicicleta del LSD
En el Ojo Ajeno: Llámalo X
Matrimonios bostonianos: otro tipo de amor entre mujeres
 
Especiales
 
facebook twitter whatsapp
Opiniones 8
  • atar cabos con lo que a unos les gusta hacer y lo que otros necesitan… los bancos de tiempo se aproximan bastante… pero tendría que participar mucha más gente para que fuese menos ‘idealista’

  • Cierto, aunque se parece mas al trueque… lo complicado es cuando hay transacción real. Hoy en día uno se puede gastar lo que quiera…pero cobrar es mucho mas dificil.

  • Pues suena a utópico,sí,pero yo creo que es porque nos han educado con un determinado sistema,y somos tan vagos o cómodos, que reestructurarlo todo llevaría mucho tiempo y sólo de pensarlo se te quitan las ganas ..no? jaja
    Aunque opino igual que tú,también he pensado miles de veces como hacer cambiar este sistema asqueroso de trabajo,en el que no te pagan por tú trabajo,sino por el tiempo empleado en ” trabajar”.Si nos pagaran por trabajo realizado créeme que se trabajaría el doble en menos tiempo y con mejores resultados,e incluso me atrevo a decir que tendríamos más tiempo para el uso personal..esto sí que es Utópico no?. Pero como desgraciadamente no todos somos iguales,ni pensamos de la misma manera,cada uno tiraría para su terreno y como pasa,y seguirá pasando,se escaquearan del trabajo los de siempre o intentarán hacer las triquiñuelas pertinentes,para desembocar en lo mismo que has dicho tú,la ley del mínimo esfuerzo.Pero ¡oye! en el pensamiento esta el cambio,sigue haciendo esas encuestas y me cuentas! jaja

    • Si, seguramente pasaría tal como dices..pero sería una competición más justa, porque se premiaría el esfuerzo, no el escaqueo o la vaguería. Dependería de uno mismo!… sin excusas.
      Pero como no va a ocurrir, no nos preocupemos mucho…
      gracias!

  • Una vez un amigo me dijo que iba a montar “el conseguidor”. ¿Lo deseas?, ¿Lo ansías?, ¿Lo necesitas? Te lo proporciono. Como,donde y cuando tu lo quieras. Algo así como la “estrategia Martini”, donde estés y a la hora que estés…Me pareció genial, pero creo que finalmente no lo llevó a cabo. ¿A lo mejor le ha llegado la hora?

  • Los que hayais probado a ser a lo largo de la jornada, al mismo tiempo, diseñadores de maquetas, conductores de mudanzas y profesores de francés, sabreis que ésta modalidad laboral tiene un nombre: autónomo. Mola porque te puedes coger todas las vacaciones que quieras…. sin cobrar, claro.

    Pero tiene un gran inconveviente: cuando eres proveedor de servicios para diferentes clientes cada uno de ellos piensa que solo estás “con lo suyo”. Y muchas veces eso es imposible. En cambio, trabajando a sueldo para una sola empresa, por tirana que sea, si te mandan a Londres no pueden pretender que a la vez hagas unos recados en un polígono de Fuenlabrada.

  • Tengo cuarentaypico, largos…El sistema es tan básico que no existe la manera de dejar hacer a los que somos creativos. Ser creativo no es solo ir vestido de negro o de colores y hacer dibujitos o storyboards. Las almas creativas necesitamos estar con la cabeza en distintos sitios y deberíamos poder ganarnos la vida con eso. Me he pasado media vida dando ideas a los demás para su beneficio y todavía no he sacado un céntimo de ideas brillantes, otros sí. También existe el pudor del “dinero sucio” que es aquello que no por injusto sino por las consecuencias fiscales, se considera feo. ¿Cuantas veces habéis abierto la puerta a un buen negocio y no os habéis atrevido (o en su defecto pensado) en pedir “lo vuestro”. El problema no es que las ideas no valgan dinero el problema es que no existe un canal “limpio” para pagarlas.
    Aquí no hablo de Urdangarinadas ni de nada parecido, hablo de que las ideas cuesta formalizarlas y tienen un valor, que acaba siendo capitalizado para su ideador en forma de favor debido o de compromiso de amistad eterna, en lugar de algo tangible: como el pastón que genera…
    Larga vida a la monogamia laboral!

  • Comentarios cerrados.