1 de octubre 2023    /   MANERAS DE VIVIR
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‘Hygge’: El significado de la felicidad que solo conocen los daneses

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Hygge significado

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En Dinamarca, existe un tipo de felicidad que trasciende la mera alegría cotidiana. Es el “hygge”. Los daneses sostienen que esta sensación es tan profunda y arraigada en su cultura que no encuentra una traducción exacta en otros idiomas. Pero, ¿de dónde surge este concepto y cómo se ha integrado en la vida diaria danesa?

El origen histórico de “Hygge” y su conexión con la filosofía danesa

La palabra hygge tiene raíces marítimas. A finales del siglo XVIII, este vocablo noruego comenzó a resonar en Dinamarca. Se utilizaba para describir la intimidad casera, el bienestar y las sensaciones acogedoras. Aunque ya aparecía en documentos daneses del siglo XIX, ha evolucionado con el tiempo, convirtiéndose en una insignia nacional danesa. Es más que una palabra; es una filosofía de vida que ha sido abrazada y celebrada por generaciones. Esta filosofía refleja un aspecto fundamental de la cultura y filosofía danesa, centrada en la creación de un ambiente cálido y la búsqueda de la felicidad en las pequeñas cosas de la vida cotidiana.

La Esencia Práctica del “Hygge”

La explicación habitual hace referencia a situaciones y sensaciones cotidianas que evocan bienestar. Imagina un té caliente en un día frío, una comida familiar junto a la chimenea, o leer un clásico recostado en el sofá. Estos momentos, aunque simples, son la esencia del “hygge”. En su aspecto más tangible, tiene que ver con la atmósfera que se crea en un lugar. A los daneses les importa mucho la luz, adorando el resplandor cálido de las velas y la claridad de un día de su sol del norte. También valoran la presentación de la comida y los espacios acogedores.

En su lado más íntimo, “hygge” está relacionado con la tranquilidad, el bienestar, el disfrute de la conversación, la compañía de otras personas y el placer de los momentos de soledad. Los daneses más mayores lo relacionan principalmente con actividades sociales. Sin embargo, las generaciones más jóvenes también lo asocian con momentos solitarios, como ver una película o leer un libro.

Ejemplos prácticos y cotidianos de “Hygge”

Este concepto es una actitud, una forma de abordar la vida con gratitud, apreciando los pequeños momentos y encontrando alegría en las cosas simples. En la cultura danesa, es un recordatorio constante de la importancia de la conexión, la comunidad y el cuidado personal.

  • Ambiente acogedor: Imagina una tarde fría de invierno, donde te encuentras sentado frente a una chimenea, envuelto en una manta suave, con una taza de chocolate caliente en la mano y el sonido suave de la lluvia golpeando la ventana. Esa sensación de calidez y confort representa el espíritu acogedor danés.
  • Reuniones familiares: Las cenas familiares en Dinamarca, especialmente durante las festividades, son un claro ejemplo de este espíritu. La comida casera, las risas compartidas y la sensación de pertenencia crean un ambiente inigualable.
  • Lectura tranquila: Tomarte un momento para ti mismo, sumergirte en un buen libro mientras estás acurrucado en tu rincón favorito de la casa, tal vez con una suave música de fondo, es otra forma de experimentar esta calidez hogareña.
  • Paseos al aire libre: Aunque a menudo asociado con la comodidad del hogar, un paseo tranquilo por un bosque o a la orilla del mar, especialmente durante el otoño cuando las hojas cambian de color, también puede ser una experiencia que refleja el encanto y la tranquilidad de la vida danesa.

Dinamarca y la Seriedad de la Felicidad

Con el paso del tiempo, “hygge” ha influido en la arquitectura, el diseño y la moda danesa, convirtiéndose en una parte integral de su identidad nacional. A medida que el mundo se vuelve cada vez más caótico, el “hygge” ofrece un respiro, una forma de encontrar paz y felicidad en las pequeñas cosas de la vida.

En Dinamarca, la felicidad se toma muy en serio. Este país suele encabezar las listas de países más dichosos del planeta y también las de mayor calidad de vida. En 2015, Dinamarca fue reconocida por su equilibrio entre las horas de trabajo y el tiempo dedicado a la vida personal, según el ranking de la OECD. España, con su propia versión de felicidad y bienestar, le sigue de cerca.

Hygge en el Contexto Global

En Alemania, existe un concepto similar, el “gemutlichkeit”, que se refiere al bienestar relacionado con la buena comida, un ambiente acogedor y una compañía agradable. Sin embargo, es el “hygge” danés el que está capturando la atención global. Los británicos han comenzado a adoptarlo, lamentando no tener un término equivalente en su idioma. Medios como The Telegraph o la BBC han dedicado varios artículos al tema, y el interés sigue creciendo.

Kayleigh Tanner, una periodista británica, se sintió tan intrigada por “hygge” que creó el blog “Hello Hygge” para compartir sus descubrimientos. Para Tanner, “hygge” es la “sensación de completa alegría, independientemente de dónde estés o qué estés haciendo”. Es una invitación a apreciar los pequeños detalles y a vivir el momento presente.

Finalmente, ¿Cómo describirías tú esta sensación de plenitud sin frío en español? Es un desafío, pero quizás, al abrazar el “hygge”, encontraremos nuestra propia palabra.

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En Dinamarca, existe un tipo de felicidad que trasciende la mera alegría cotidiana. Es el “hygge”. Los daneses sostienen que esta sensación es tan profunda y arraigada en su cultura que no encuentra una traducción exacta en otros idiomas. Pero, ¿de dónde surge este concepto y cómo se ha integrado en la vida diaria danesa?

El origen histórico de “Hygge” y su conexión con la filosofía danesa

La palabra hygge tiene raíces marítimas. A finales del siglo XVIII, este vocablo noruego comenzó a resonar en Dinamarca. Se utilizaba para describir la intimidad casera, el bienestar y las sensaciones acogedoras. Aunque ya aparecía en documentos daneses del siglo XIX, ha evolucionado con el tiempo, convirtiéndose en una insignia nacional danesa. Es más que una palabra; es una filosofía de vida que ha sido abrazada y celebrada por generaciones. Esta filosofía refleja un aspecto fundamental de la cultura y filosofía danesa, centrada en la creación de un ambiente cálido y la búsqueda de la felicidad en las pequeñas cosas de la vida cotidiana.

La Esencia Práctica del “Hygge”

La explicación habitual hace referencia a situaciones y sensaciones cotidianas que evocan bienestar. Imagina un té caliente en un día frío, una comida familiar junto a la chimenea, o leer un clásico recostado en el sofá. Estos momentos, aunque simples, son la esencia del “hygge”. En su aspecto más tangible, tiene que ver con la atmósfera que se crea en un lugar. A los daneses les importa mucho la luz, adorando el resplandor cálido de las velas y la claridad de un día de su sol del norte. También valoran la presentación de la comida y los espacios acogedores.

En su lado más íntimo, “hygge” está relacionado con la tranquilidad, el bienestar, el disfrute de la conversación, la compañía de otras personas y el placer de los momentos de soledad. Los daneses más mayores lo relacionan principalmente con actividades sociales. Sin embargo, las generaciones más jóvenes también lo asocian con momentos solitarios, como ver una película o leer un libro.

Ejemplos prácticos y cotidianos de “Hygge”

Este concepto es una actitud, una forma de abordar la vida con gratitud, apreciando los pequeños momentos y encontrando alegría en las cosas simples. En la cultura danesa, es un recordatorio constante de la importancia de la conexión, la comunidad y el cuidado personal.

  • Ambiente acogedor: Imagina una tarde fría de invierno, donde te encuentras sentado frente a una chimenea, envuelto en una manta suave, con una taza de chocolate caliente en la mano y el sonido suave de la lluvia golpeando la ventana. Esa sensación de calidez y confort representa el espíritu acogedor danés.
  • Reuniones familiares: Las cenas familiares en Dinamarca, especialmente durante las festividades, son un claro ejemplo de este espíritu. La comida casera, las risas compartidas y la sensación de pertenencia crean un ambiente inigualable.
  • Lectura tranquila: Tomarte un momento para ti mismo, sumergirte en un buen libro mientras estás acurrucado en tu rincón favorito de la casa, tal vez con una suave música de fondo, es otra forma de experimentar esta calidez hogareña.
  • Paseos al aire libre: Aunque a menudo asociado con la comodidad del hogar, un paseo tranquilo por un bosque o a la orilla del mar, especialmente durante el otoño cuando las hojas cambian de color, también puede ser una experiencia que refleja el encanto y la tranquilidad de la vida danesa.

Dinamarca y la Seriedad de la Felicidad

Con el paso del tiempo, “hygge” ha influido en la arquitectura, el diseño y la moda danesa, convirtiéndose en una parte integral de su identidad nacional. A medida que el mundo se vuelve cada vez más caótico, el “hygge” ofrece un respiro, una forma de encontrar paz y felicidad en las pequeñas cosas de la vida.

En Dinamarca, la felicidad se toma muy en serio. Este país suele encabezar las listas de países más dichosos del planeta y también las de mayor calidad de vida. En 2015, Dinamarca fue reconocida por su equilibrio entre las horas de trabajo y el tiempo dedicado a la vida personal, según el ranking de la OECD. España, con su propia versión de felicidad y bienestar, le sigue de cerca.

Hygge en el Contexto Global

En Alemania, existe un concepto similar, el “gemutlichkeit”, que se refiere al bienestar relacionado con la buena comida, un ambiente acogedor y una compañía agradable. Sin embargo, es el “hygge” danés el que está capturando la atención global. Los británicos han comenzado a adoptarlo, lamentando no tener un término equivalente en su idioma. Medios como The Telegraph o la BBC han dedicado varios artículos al tema, y el interés sigue creciendo.

Kayleigh Tanner, una periodista británica, se sintió tan intrigada por “hygge” que creó el blog “Hello Hygge” para compartir sus descubrimientos. Para Tanner, “hygge” es la “sensación de completa alegría, independientemente de dónde estés o qué estés haciendo”. Es una invitación a apreciar los pequeños detalles y a vivir el momento presente.

Finalmente, ¿Cómo describirías tú esta sensación de plenitud sin frío en español? Es un desafío, pero quizás, al abrazar el “hygge”, encontraremos nuestra propia palabra.

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Opiniones 52
  • Hola Mar,

    He leído tu artículo sobre el ‘hygge’ danés y no he podido evitar asociarlo con lo que para los asturianos significa el verbo ‘prestar’ (nada que ver con ‘dejar algo a alguien’).
    Se usa para describir aquello que no sólo te gusta, sino que te hace feliz, te llena y te produce bienestar.Puede ser desde una comida con amigos hasta un paseo por la montaña o un día de fútbol. Incluso se me hace difícil buscar un sinónimo en español y parece que el concepto de ‘hygge’ de los daneses se le acerca bastante.

    Si no sabías de esto, te animo a que investigues algo sobre ello, espero que te preste.

    Un saludo,
    Carlos

    • En Galicia también se usa el término “presta” como en Asturias.

      “Como me prestou este caldo” …”como me prestou falar contigo” …”que ben presta unha Estrella Galicia cun amigo”

      En el norte-norte tenemos ese “hygge” danés como se ve en la coincidencia Astur – Galaica.

      Este artículo es de lo mejor que he leído últimamente. Un 10.

      Saludos.

    • Completamente de acuerdo, Carlos. Soy asturiana aunque hace muchos años que vivo en Madrid y al leer ese comentario, enseguida se me vino a la cabeza la palabra, “prestar” a la que nunca encontré sinónimo. Ahora ya sé como se dice en otro idioma.

    • Carlos, creo que no has entendido bien qué es el hygge. Para mi, no tiene nada que ver con cómo los asturianos usáis el “prestar”, que es más bien un sinónimo de “molar”

  • Creo que los Neerlandeses también tienen una palabra: “gezellig” que incluiría el concepto de acogedor.

  • Yo lo describiría cómo… si me quedo mirando mucho al fuego luego me haré pis en la cama, mejor me voy al bar con los colegas a tomarnos una birra, que creo q paco se ha echado novia

  • En Galicia también se usa el término “presta” como en Asturias.

    “Como me prestou este caldo” …”como me prestou falar contigo” …”que ben presta unha Estrella Galicia cun amigo”

    En el norte-norte tenemos ese “hygge” danés como se ve en la coincidencia Astur – Galaica.

    Este artículo es de lo mejor que he leído últimamente. Un 10.

    Saludos.

  • En definitiva: El placer de las “pequeñas” cosas. Nos perdemos en buscar la “Gran Felicidad” y nos pasan desapercibidos esos pequeños momentos (un café mientras se contempla la lluvia, un libro, el silencio…) Y lo cotidiano.

  • Una traducción coloquial sería “buen rollito”. Pasé varios años en Dinamarca y sí que se lo toman en serio. Se decía que un juez llegó a reprender a un fiscal por arruinar el hygge de su juzgado al interrogar con demasiada severidad a un testigo.

  • Yo utilizaría la palabra “placidez”. Expresa un estado de bienestar inundado por la calma, la serenidad, la tranquilidad…

  • Es el segundo articulo que emcuentro hoy de dinamarca. El Hygge palabra que he utilizado bastante puede ser tb ir a un bar y tomar unas cervezas, o una cena con amigos donde le dan mas importancia a la comida que.a las conversaciones asi que siempre se acaba hablando de comida o de series. Tambien hygge es una excusa para tomarse unas cervezas en el parque despues de trabajar eso si en verano, solo veras borrachos en las calles en invierno disfrutando de ellas me refiero.

  • Si, como dice Carlos ese término es muy usado, también en Gaicia, o por lo menos por la Zona de Lugo, y es algo similar, aunque puede usarse para un sin fin de ocasiones y quizás no expresa felicidad como tal si no más bien ganas de hacer algo (o así lo entiendo yo).

    Ah y en España también hace frió.. que no todo es costa y Mediterraneo…

  • Me ha gustado mucho el artículo porque está muy bien descrito. No sé si has vivido en Dinamarca, pero una que sí, ésta palabra ya la tengo incorporada a mi vocabulario y doy fe de que los daneses les encanta disfrutar de muchos momentos “hygge”.

    • Milyen helyzetekre? Az F/A-18E/F gépek AIM-120D-vel és az AESA radarral a Tomcatnél durvább képességeket kapnak meg.- Nem csak kb. 10 fokos szögtartományban támadható több cél, bár csak 4 asszem.- Van data link.- Nem 4 vagy 6 rakéta tehetÅ‘ rá, hanem akár 10 db is. Még 6 darabbal is leszállhat a hordozón.Tetszik / Egyetértek: 0 Az értékeléshez be kell

  • Tiene mucha razón Carlos, “prestome” mucho el artículo. Ese placer de las pequeñas cosas y las grandes emociones, esa sensación de felicidad inmensa cercana a la euforia interior.

  • Y, siguiendo con el asturiano, también existe la palabra prestoso/a y afallaizo. Aunque la segunda suele tener una acepción más física, más a lugares, quizás, también, cerca de la chimenea.

    Ye que los asturianos somos muy nórdicos. … mucho más de lo que la latitud indica…

  • Yo lo llamaría gozo. Simplemente.

    Qué gozo. La estoy gozando. En desuso, a menudo por desconocimiento: nuestro registro idiomático cada vez es menor.

    @Carlos Uría: En gallego también se emplea prestar: préstame, prestóume. ¿Prestouche?. Y alguna vez lo he oído en Cantabria, aunque supongo que como préstamo del asturiano.

  • Efectivamente Carlos! no hace falta irse hasta dinamarca para ver vocablos que no se usan en Español. Los asturianos y las asturianas no entendemos como podéis vivir sin el verbo “prestar”, para nosotrxs es fundamental xD para mí la traducción más parecida sería “satisfacer” al igual que con hygge, pero suena muy raro: Como presta (me satisface) leer un libro delante de la chimenea en invierno; o, como presta (me satisface) tomar una sidrina después de ir a la playa… Aunque en el artículo no me queda claro si hygge es un verbo, un sustantivo, un adjetivo…

  • La palabra en alemán se escribe Gemütlichkeit (es sustantivo y debe ir en mayúscula y lleva diéresis). Y efectivamente es un significado similar al que se describe de la palabra danesa.

  • Conforme iba leyendo el artículo he recordado perfectamente un montón de ocasiones en las que he sentido eso. No sé cómo hemos podido vivir sin esa palabra. Recuerdo una Nochebuena que estando en un bar pasándolo bien, ojo, me asaltó la necesidad de sentir eso y me fui a casa, me puse Casino y me lo pasé brutal yo sola en mi sofá. Fue como atender a una llamada de la naturaleza.

    • Muy buen artículo, llegué aquí desde La Nación. Cuando vi también en mi panel que la hora estaba mal insulté a mis amigos que toquetean la máquina, pero luego vi que el celular también estaba adelantado.Una vergüenza este país.Saludos.-share  

    • Anônimo, eu só posto torrent de filmes difíceis de encontrar.Simonal está chegando às locadoras e poderá facilmente ser assistido, ok?É um filmaço que merece inclusive ser comprado.Abraço!

  • De acuerdo contigo, Carlos. Soy asturiana aunque llevo muchísimos años viviendo en Madrid. Nunca encontré un sinónimo a la palabra “prestar” y ahora ya se´como se dice en otro idioma. Un saludo

  • En neerlandés existe el mismo concepto en la palabra “gezelligheid”, también comparable con el alemán “gemutlichkeit”, que además deben de ser cognados. Así que parece más un concepto ligado a toda una área geográfica que un concepto meramente danés, alemán u holandés.

    Saludos,
    Juan Miguel

  • Atalantarse o sentirse atalantado esa es la palabra en español para describir el placer de alguien insolado a quien se le ofrece una bebida fresca , el de un hijo que regresa a su hogar natal para reencontrarse con una madre un padre tras tiempo de ausencia. El del que sufre frio y recibe cobijo seguro, amistad y un alimento caliente, lo mismo que hace entrañable una sopa dada con una sonrisa amable. Es el calor de la humanidad aunado a la complacencia del alma y cuerpo.

  • Muy buen artículo! Te escribo este comment desde Copenhague, desde donde tengo el placer de experimentar hygge y trabajar e investigar sobre la felicidad.

  • Falta analizar el por qué de una tasa elevada de suicidios en Dinamarca: se conoce que no todos los daneses experimentan eso del hygee, que existe una gran desigualdad en ese sentido, aunque la desigualdad económica sea menor que en otros países. Quizá en ese país han necesitado una palabra para nombrar un bien escaso y muy deseado por todos, mientras que en otros países no hablamos tanto de ello sino que simplemente lo disfrutamos.

  • Para mí ese hygger es un estado de serenidad Mar, independiente de lo que haya alrededor. Puede ser en una fiesta con amigos o sola viendo la tele. Es la sensación de sentir que vivo el momento presente y lo disfruto con toda su plenitud. Es un buen hygge no?

  • Hola,
    Acabo de leer con gran interés la nota sobre el termino “HYGGE”. Y saltó una pregunta mientras iba leyendo. En este mundo actual, donde la gente se muere sin su celular en mano, será acaso Dinamarca uno de los países donde dejan de lado esos aparatos para disfrutar el momento, cómo realmente se debe?

  • Mar, qué artículo tan bien elaborado. He estado pensando en algún adjetivo que se le parezca, sin embargo no tengo éxito. Yo propongo tomar tal cual e introducirlo al castellano.

    Un fuerte abrazo.
    Saludos desde México.

    Gustavo

  • Hace unos años, cuando la vida parecía llevarme en andas, me dije: “un sólo evento al día”…eso será mi vida de ahora en adelante. Eso significaba no recargarme de obligaciones que me abrumaban. Ese pequeño invento me permitió leer mucho más…esa era mi pasión.
    Al poco tiempo, publiqué mi primer libro.
    He publicado dos. Y no tengo ningún apuro en publicar el tercero.
    He vivido a mi ritmo.

    Ahora, tengo edad suficiente para hacer lo que quiero cada día. He llegado

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