Ā«Cuando los trabajadores de CzÄstochowa, en Polonia, se enteraron de que los empresarios de la ciudad habĆan mandado construir un metro subterrĆ”neo para no tener que cruzarse con ellos por las calles, se rebelaron y crearon una red de carriles suspendidos, para robarles el cieloĀ». (Lady DistopĆa)
Pese a su triste trasfondo, y el evidente peligro que corrĆan sus protagonistas, la de los trabajadores de CzÄstochowa es de esas historias que merecerĆan ser ciertas. Ocurre con la mayorĆa de las narradas por Lady DistopĆa en su cuenta de Twitter.Ā
La disconforme actitud de su autora con la realidad dio origen a estos microrrelatos: «Como no me gusta, me la invento, pero el presente es el que hay, asà que lo hago con el pasado o con el futuro».
Coleccionista de imĆ”genes antiguas Ā«insólitasĀ», Lady DistopĆa encontró en ellas la vĆa para mitigar el cabreo que la actualidad le produce mĆ”s veces de las deseadas. De ellas parten muchas de sus historias.
Ā«Me gusta que las imĆ”genes tengan un punto gótico, que guarden algĆŗn tipo de misterio, que me lleven a preguntarme quiĆ©n harĆa esa foto, por quĆ© y en quĆ© circunstancia. Entonces, si me viene a la cabeza una posible respuesta, cojo y la enredo todavĆa mĆ”sĀ».
Dice encontrarlas haciendo Ā«bĆŗsquedas rarasĀ». Ā«Tengo en el ordenador una carpeta con miles de fotos que crece casi a diario. Para mĆ es un vicio y a la vez una forma de descubrir a fotógrafas y fotógrafos de otras Ć©pocasĀ». Que sean antiguas es un requisito indispensable ya que prefiere las que no tienen derechos o son de autorĆa desconocida. Y en el caso de tenerla, investiga para poder mencionar a su autor.
Aunque Lady DistopĆa aƱade un motivo mĆ”s a su afinidad con las fotos vintage: Ā«Me gusta jugar a reivindicar un pasado inexistente en el que las mujeres hubieran tenido las mismas posibilidades que los hombres, por ejemplo. Si te fijas, los personajes femeninos que me invento son casi siempre pioneras o expertas en algoĀ».


En ocasiones, la autora cambia el método. «Me gusta complicarme las cosas. A veces tengo la idea del relato en la cabeza, entonces escribo el tuit y después le busco la imagen».
El nombre elegido para el perfil de Twitter no acota la naturaleza de las narrativas. Es mĆ”s, entre ellas no abundan precisamente las distopĆas: Ā«No todas lo son. Solo algunas. Hay historias tristes, como tambiĆ©n las hay alegres. Pero por esoĀ en mi pĆ”gina de Patreon concreto: “Me invento planetas, distopĆas o universos paralelos”Ā».
Ajustar el texto a los 280 caracteres de Twitter es otro de los desafĆos al que tiene que enfrentarse. Ā«Para mĆ, es un ejercicio mental muy bueno intentar crear un universo en tan pocos caracteres. Tiene algo de reto, de tener que solucionar una historia en un espacio muy pequeƱoĀ».
Pero a veces la historia crece y crece, Ā«o es mĆ”s complicada y no quiero quedarme con las ganas de escribirlaĀ». Para esos casos, Lady DistopĆa encontró la solución en la pĆ”gina de Patreon antes citada.Ā AdemĆ”s de poder explayarse, espera que esta vĆa contribuya a paliar su Ā«precariaĀ» situación: Ā«Escribir me lleva tiempo y esfuerzo, y como todavĆa no me puedo creer la acogida que estĆ”n teniendo mis tuits, pensĆ© que a lo mejor habrĆa por ahĆ locos a los que les gustan mis textos, quieran leer los que son mĆ”s largos y que ademĆ”s estĆ©n dispuestos a colaborarĀ».
Lady DistopĆa asegura padecer un sĆndrome muy femenino: el de la impostora. Aunque Ā«no pienso dejar de pelearme con Ć©lĀ», advierte.


Defiende su anonimato, pero no le importa aportar alguna que otra pĆldora sobre su vida: Ā«Mi profesión estĆ” relacionada directamente con escribir, pero de otra manera, con otra tĆ©cnica.Ā No tiene nada que ver con esto. He publicado dos novelas y ahora estoy terminando una tercera, pero eso no me da de comer. Lo hago por aprender y para intentar comprenderme y comprenderĀ».

Lectora empedernida, Lady DistopĆa asegura contar con muchos referentes, pero no a la hora de escribir: Ā«Me fijo mĆ”s en la realidad, lo que me gusta leer suele ser muy diferenteĀ». Como deseo para el futuro se queda con el de ser Ā«una mujer libreĀ» porque, Ā«bruja lo voy a seguir siendo siempreĀ».
TambiĆ©n te puede interesar:Ā
āThe handmaidās taleā: cómo se construye una distopĆa
Las fotos de los otros, segĆŗn la mirada del Erik Kessels carioca
FotografĆas que mienten (sin estar retocadas)