“Cuando vuelves a tu propia cultura, brilla de una forma diferente”. LucĂa Herrero llevaba unos años viviendo fuera de España y empezĂł a sentir una cierta fascinaciĂłn otra vez por su paĂs. Por primera vez era capaz de verlo todo con otros ojos más objetivos.
Durante unas vacaciones se topĂł con una playa turĂstica. Una de esas que te encuentras en cualquier rincĂłn del Mediterráneo. De arriba abajo estaba tomada por grupo de personas cuya seña de identidad eran las sombrillas, toallas, colchonetas, palas y sillas. Cada uno acompañado por un compendio de suministros para pasar horas y horas en la arena.
“Cuando vuelves a tu propia cultura, brilla de una forma diferente”. LucĂa Herrero llevaba unos años viviendo fuera de España y empezĂł a sentir una cierta fascinaciĂłn otra vez por su paĂs. Por primera vez era capaz de verlo todo con otros ojos más objetivos.
Durante unas vacaciones se topĂł con una playa turĂstica. Una de esas que te encuentras en cualquier rincĂłn del Mediterráneo. De arriba abajo estaba tomada por grupo de personas cuya seña de identidad eran las sombrillas, toallas, colchonetas, palas y sillas. Cada uno acompañado por un compendio de suministros para pasar horas y horas en la arena.