Esos tipos apolillados que andan por la universidad son aficionados a medir toda clase de cosas. La duración de las estaciones. La masa de los objetos. La velocidad de la luz. La definición del ojo humano. Cosas asĆ. Incluso tratan de medir aspectos mĆ”s subjetivos o abstractos de la naturaleza, como el lugar donde viven las mujeres mĆ”s cañón .
Para medir la belleza de todas las mujeres de Gran BretaƱa que se encontraba a su paso, el cientĆfico victoriano Francis Galton recorrió las principales calles de las grandes ciudades con un contador en su bolsillo, registrando cuĆ”ntas chicas guapas encontraba, asĆ como las medianamente bellas y las feas, Ā«Londres fue catalogada como la mejor; Aberdeen, la peorĀ», cuenta Richard Wiseman en RarologĆa .
Sin embargo, algo tan obvio como la longitud del pene fue un tema objeto de anĆ”lisis que resultaba, digamos, embarazoso. ĀæAcaso el pene no es un asunto cientĆfico como otro cualquiera? Si incluso propició la blogosfera . Sea como fuere, esta prudencia, mezclada con un poco de rubor, retrasó durante tantos siglos que dispusiĆ©ramos de un buen catĆ”logo de los penes del planeta Tierra.
Los primeros miembros medidos
El primer estudio documentado sobre el tamaƱo medio del pene se remonta a 1899 y fue llevado a cabo por el alemĆ”n Heinrich Loeb , quien tomó medidas de 50 individuos y estableció que la media era 9,4 cm en estado flĆ”cido. En 1942, W. A. Schonfeld situó la marca en 13 centĆmetros extendido. Pero, por sorprendente que parezca, las medidas exactas de los penes erectos no se publicaron hasta una fecha tan reciente como 1992, cuando un grupo de 150 hombres se dejó inyectar papaverina y prostaglandina para generar una erección artificial.
Ese estudio dio como resultado que la media del pene era de 14,5 centĆmetros en erección , y 11,92 centĆmetros de circunferencia. Son medidas consoladoras para los hombres, acostumbrados a guarismos que empiezan por el dĆgito Ā«2Ā» (porque nuestra cultura relativa al sexo es bĆ”sicamente la porno, digĆ”moslo ya). AdemĆ”s, segĆŗn la ciencia, un pene es completamente funcional y proporciona placer a la mujer si tiene una longitud entre 8 y 12 centĆmetros.
Sin embargo, establecer una media de la longitud del pene solo con 150 ejemplares resulta, cuando menos, aventurado. ĀæY el pene de RasputĆn , que se decĆa que originalmente medĆa 40 centĆmetros? (hoy solo se conservan 28,5 centĆmetros en el museo erótico de San Petersburgo).
La verdadera medición exhaustiva de longitudes de pene llegó en el año 2001, cuando unos investigadores italianos examinaron 3.300 penes de italianos de entre 17 y 19 años, concluyendo que la media era 12,5 cm en erección y 9 cm en estado flÔcido . Como veis, la media incluso se rebajó. Porque una de las mayores burbujas de la historia de la humanidad, por encima de la de los tulipanes holandeses o la inmobiliaria de EspañistÔn, es la relativa a la longitud de los penes humanos.
Con todo, si la medĆs, tened en cuenta lo siguiente: el pene erecto se mide por encima del tronco del pene, apoyando la regla contra la sĆnfisis del pubis . Y si tenĆ©is barriga o mucha grasa, debĆ©is empujar el vientre hacia adentro, hasta lograr que la regla apoye contra el hueso pubiano .
Otros mitos sobre las medidas
El pene erecto largo, grueso y duro es sĆmbolo de virilidad, y por eso es vĆctima de innumerables tergiversaciones, mitos y falacias. Menos para Fernando SĆ”nchez Dragó , claro, que en una de sus tantas intervenciones marcianas en televisión (discutiendo sobre Viagra y Cialis) adujo que hay diferentes tipos de erección: la morcillona, la dura o incluso la dura con brillo, entre otras. Y que en sus escarceos sexuales habĆa tenido oportunidad de compartir cama con una cĆ©lebre actriz porno que le gustaba que se la metieran blanda (sic). Y SĆ”nchez Dragó asegura que logró penetrarla sin erección.
Fanfarronadas aparte, uno de los mitos mĆ”s extendidos que debemos derrocar de una vez por todas es el que se describe con ese signo de los dedos Ćndice y pulgar que indica que existe una relación inversa entre altura corporal y longitud del pene . Un signo usado mil veces por los bajitos (sobre todo en discotecas y bajo contaminación etĆlica). Un signo tan omnipresente como el de los dedos separados de Spock . Pero incierto. Si eres bajito es mĆ”s probable que tu pene sea mĆ”s pequeƱo que si eres alto. Es lo que han revelado diversos estudios, como este , este y este : de media, a mayor altura corporal, pene mĆ”s largo (aunque solo un poco mĆ”s largo).
Tampoco el tamaƱo de los pies estĆ” relacionado con la longitud del pene. Existe algĆŗn estudio de la dĆ©cada de 1980 que correlaciona ambos, pero en 2002 fue refutado . De hecho, no parece haber ninguna asociación entre el tamaƱo de alguna parte del cuerpo y el tamaƱo del pene. Excepto una: la relación que hay entre el dedo anual y el Ćndice, que indica la exposición a testosterona durante el embarazo. Tal y como abunda en ello Pere EstupinyĆ en su libro S=EX2 :
No se sabe muy bien por quĆ©, pero la exposición a testosterona durante el embarazo influye en la longitud de los dedos de la mano. A mĆ”s testosterona, mĆ”s largo es el anular respecto al Ćndice. Desde que se descubrió esta relación, los investigadores estĆ”n utilizando esta medida como indicación de exposición prenatal a andrógenos, y relacionĆ”ndola con gran diversidad de caracterĆsticas fĆsicas y comportamentales.
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Ā«Tiene nombres mil, tiene nombres mil, el miembro virilĀ», cantaba Leonardo DantĆ©s en una de sus tantas estrambóticas canciones estilo Casiotone. Y tenĆa razón. Aunque se le olvidó que tambiĆ©n tiene medidas mil, y que poco se sabe aĆŗn de este tema, quizĆ” porque continĆŗa resultando embarazoso o porque no proporciona suficiente rĆ©dito acadĆ©mico a esos apolillados intelectuales de universidad.
AsĆ, a dĆa de hoy, a pesar de que lo que se publique en prensa, todavĆa no se dispone de investigaciones cientĆficas serias que comparen estadĆsticamente una muestra amplia de tamaƱos entre distintas nacionalidades y etnias . Y si tradicionalmente se ha dicho que los africanos tienen un gran paquete respecto a los asiĆ”ticos, quizĆ” es porque estadĆsticamente hay mĆ”s africanos de elevada estatura que asiĆ”ticos. AsĆ que mantengamos en suspenso que los apellidados Ndongo la tienen mĆ”s grande que los Liu .
Imagen interior: PixabayĀ
Pie grande, mano grande… pene grande.
Me mide 21 centĆmetros y bastante grueso.
Las mujeres que han tenido la oportunidad de catarlo, alguna se volvió loca: les gustan enormes porque les excita mÔs y les da mÔs placer. Todo, eso si, dentro de unas medidas. Hay una tabla muy interesante por internet. Ya si se te pone dura como una bola de billar y aguanta como Duracell (es curioso, a algunos se nos retarda la eyaculación directamente proporcional a la excitación)
En definitiva: con buena polla, follar es coser y cantar si las sabes utilizar.
DE ILUSION TB SE VIVE, COLEGA
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