La raÃz de esta tendencia se encuentra en Facebook, Instagram o Twitter. En las redes no se muestran solo las vivencias personales, sino que el usuario las emplea para promocionarse socialmente: por eso hace falta adaptarlas a un lenguaje atractivo. Hoy la gente se marcha de vacaciones sabiendo que tiene un público al que alimentar.
Lo interesante de prestar atención a las excentricidades en que incurren los famosos es que anticipan lo que vendrá. Las redes sociales hacen creer que las oleadas de postureo surgen de manera más o menos democrática o espontánea, es decir, que nacen en algún lugar del pueblo y se propagan.
El caso es que si los famosos contratan cineastas particulares para grabar sus vacaciones o sus fiestas, es cuestión de tiempo que suceda algo parecido entre tus amigos y familiares. Se tratará de trabajos de menor calidad: un sucedáneo del glamour de los famosos lo suficientemente convincente como para que uno crea que merece la pena pagar por unas vacaciones lo que pagarÃa por dos.
El primer paso para que una excentricidad cara se expanda es hacerla pasar por un deseo moralmente aceptable y comprensible. «No hay un cliente promedio, se trata de si los recuerdos son lo suficientemente importantes como para garantizar la inversión», argumenta Gemmell. Un razonamiento exhortante: el gasto como medida del nivel de relevancia de tu vida.
«Aunque para algunos el dinero puede no ser un problema, otros sólo quieren invertir lo que puedan en la preservación de recuerdos», continúa. Sus servicios 24/7 salen a unos 2.800 euros diarios.
La raÃz de esta tendencia se encuentra en Facebook, Instagram o Twitter. En las redes no se muestran solo las vivencias personales, sino que el usuario las emplea para promocionarse socialmente: por eso hace falta adaptarlas a un lenguaje atractivo. Hoy la gente se marcha de vacaciones sabiendo que tiene un público al que alimentar.
Lo interesante de prestar atención a las excentricidades en que incurren los famosos es que anticipan lo que vendrá. Las redes sociales hacen creer que las oleadas de postureo surgen de manera más o menos democrática o espontánea, es decir, que nacen en algún lugar del pueblo y se propagan.
El caso es que si los famosos contratan cineastas particulares para grabar sus vacaciones o sus fiestas, es cuestión de tiempo que suceda algo parecido entre tus amigos y familiares. Se tratará de trabajos de menor calidad: un sucedáneo del glamour de los famosos lo suficientemente convincente como para que uno crea que merece la pena pagar por unas vacaciones lo que pagarÃa por dos.
El primer paso para que una excentricidad cara se expanda es hacerla pasar por un deseo moralmente aceptable y comprensible. «No hay un cliente promedio, se trata de si los recuerdos son lo suficientemente importantes como para garantizar la inversión», argumenta Gemmell. Un razonamiento exhortante: el gasto como medida del nivel de relevancia de tu vida.
«Aunque para algunos el dinero puede no ser un problema, otros sólo quieren invertir lo que puedan en la preservación de recuerdos», continúa. Sus servicios 24/7 salen a unos 2.800 euros diarios.