Los monumentos mƔs impresionantes de Praga ya no estƔn en la calle. Las estatuas del Puente de Carlos ya no estƔn en el Puente de Carlos. Muchas de las grandes esculturas que se ven por la ciudad son rƩplicas. Los originales reposan en el Lapidarium, uno de los rincones mƔs impresionantes de la capital checa.
Este edificio esconde esculturas de todas las Ć©pocas y estilos, desde el siglo XI hasta el XIX. Son estatuas que pertenecĆan a las casas demolidas durante el saneamiento del barrio judĆo, esculturas góticas de ParlĆ©Å, la columna mariana de la plaza de la Ciudad Vieja en Praga o siete grupos escultóricos originales del Puente de Carlos. Es un lugar impresionante.
Este ha sido uno de los escenarios escogidos para el Designblok, el festival de diseƱo mĆ”s importante del paĆs. Moda, diseƱo industrial y arte se suceden en tres espacios diferentes.

El que se da cita en Lapidario, llamado Art House, llama la atención por intercalar las esculturas del pasado de la ciudad con piezas contemporÔneas e instalaciones de estética futurista. No en vano la temÔtica de esta nueva edición es el futuro.
El espacio estÔ a oscuras; majestuosas estatuas se alzan entre las sombras, amenazadoras como gÔrgolas. En medio de este lúgubre ambiente parpadea un verde neón.
Es la luz de Party Vase, un moderno jarrón con asas de neón. La República Checa es conocida por su cristal de bohemia y su arte rococó. En Party Vase, la artista Dominika PetrýtlovÔ conjuga estos elementos del pasado para crear una pieza rabiosamente moderna.



Los temas habituales de los jarrones rococó eran escenas de amor de la aristocracia europea. La temÔtica no es muy diferente de la que refleja PetrýtlovÔ, que ha recorrido bares y discotecas buscando escenas de cortejo. Escenas que después plasma en sus jarrones con el mayor realismo posible. La oscuridad, la psicodelia y las luces de neón subrayan un proyecto arriesgado, a medio camino entre pasado y futuro. El lugar donde se expone no hace mÔs que potenciar su mensaje.
Designblok se completa con los espacios Superstudio y Openstudio, que tienen lugar en el cercano Palacio de Congresos y que aúnan el trabajo de 348 diseñadores. El primero es un lugar en el que marcas de renombre internacional presentan trabajos, prototipos y diseños relacionados con la temÔtica del festival. Sonos, Grohe, Kartel o Renault son algunas de las empresas que tuvieron presencia en esta edición.
En el pabellón cercano, pequeƱos diseƱadores venidos de media Europa exponen sus productos. Ā«Tenemos una parte internacional, pero lo cierto es que queremos potenciar lo checoĀ», explica KateÅina DrvotovĆ”, responsable de prensa del festival. Ā«La idea es tener toques de diseƱo internacional, pero dar una oportunidad a los diseƱadores locales. Mostrar su trabajo al mundoĀ». Lo del mundo es literal.


Después de 21 ediciones, el Designblok se ha convertido en un referente en Centroeuropa. «Aún no tenemos la proyección del Salone del Mobile di Milano», explica DrvotovÔ con una sonrisa, «pero mucha gente que estÔ visitando la ciudad aprovecha para apuntar esta cita en su agenda».
Designblok completa su plantel con desfiles de moda, actuaciones, performances y charlas. La primera de este año, de hecho, analizaba cómo vender el diseño y el buen hacer nacional poniendo como referencia el Made in Italy. Praga tiene una floreciente escena creativa.

Nombres como Maxim Velcovsky (diseƱador y artista del vidrio, invitado de honor el aƱo pasado) o Teresa Rosalie Kladosva (diseƱadora de moda encargada de dar el pistoletazo de salida este aƱo) empiezan a generar un ruido local con ecos en el exterior.
Ā«El diseƱo y el arte siempre han sido importantes en la RepĆŗblica ChecaĀ», confirma DrvotovĆ”, que pone como ejemplo la boyante e histórica artesanĆa del cristal. Ā«Pero es cierto que en los Ćŗltimos aƱos, quizĆ” gracias al turismo, ha cobrado mĆ”s relevanciaĀ».
INNSiDE Y LOS NUEVOS ACTORES CREATIVOS
El cristal de bohemia estÔ dando paso a la escena bohemia. Basta con dar un paseo por la ciudad para comprobarlo. No solo por el archiconocido centro histórico, sino por pujantes y modernos barrios de la periferia como HoleŔovice y Bubny.
Allà el barroco cede espacio ante los edificios industriales. El diseño se cuela en las numerosas tiendas y cafés, en edificios icónicos como la Casa Danzante de Frank Gehry o en museos como DOX, el centro de arte contemporÔneo de la ciudad. Precisamente con este último ha empezado a colaborar otro nuevo actor en la ciudad.

INNSiDE Prague Old Town pretende conectar al visitante con el vibrante espĆritu cultural de la capital. La marca joven de MeliĆ” lleva aƱos apostando por el diseƱo, la arquitectura y el arte. Lo hace partiendo de sus propias instalaciones.
El INNSiDE Prague Old Town fue diseñado por la famosa arquitecta española Meritxell Cuartero. Ya desde su entrada, con una interesante y cuidada selección de libros de arte y diseño, deja bien clara la importancia de esta materia en el ADN de la marca.

Lo hace relacionĆ”ndose con los actores culturales y creativos de la ciudad. En el caso del INNSiDE Prague Old Town esta relación se deja ver en eventos como el mencionado Designblok (al que la cadena invitó a una serie de medios espaƱoles como Yorokobu). Pero tambiĆ©n con eventos futuros, como su colaboración con el centro de arte contemporĆ”neo DOX. Junto a ellos se ha propuesto celebrar distintos eventos artĆsticos en el 2020, convirtiĆ©ndose en un importante epicentro artĆstico de la ciudad.
Praga estĆ” viviendo tiempos de una efervescencia cultural envidiable. Lugares como el INNSiDE Prague Old Town estĆ”n contribuyendo a desarrollarla y hacen de enlace con los visitantes extranjeros. Se pretende de esta forma conectar al viajero con una escena creativa que va mĆ”s allĆ” de la ruta turĆstica. Y asentarse como una bonita base de operaciones.

