La ciencia está quitando emociĂłn a la magia. En unos años los aparatos electrĂłnicos podrĂan disolverse en agua. Esto se consigue utilizando una tecnologĂa biodegradable, con las mismas capacidades que la convencional, pero que desaparece al introducirla en lĂquido. Esta tecnologĂa, llamada Transient Electronics, acabarĂa con las montañas de basura que generan los dispositivos desechados y abre nuevas oportunidades a la medicina.
El director de la investigaciĂłn, John A. Rogers, dijo en una entrevista con News Bureau que “desde los primeros tiempos de la industria electrĂłnica, uno de los objetivos clave del diseño ha sido construir dispositivos que duren para siempre. Pero si piensas en la posibilidad contraria (aparatos creados para desaparecer fĂsicamente de una forma controlada y programada), surgen nuevas aplicaciones”.
El grupo de investigaciĂłn ha construido transistores efĂmeros, diodos, sensores de presiĂłn y temperatura, fotodetectores, celdas solares, antenas y osciladores de radio, y cámaras digitales.
Estos dispositivos están encapsulados en seda. Aunque su estructura no es siempre igual. El equipo ha trabajado en distintas estructuras de seda en funciĂłn del tiempo que quieren que perdure antes de su disoluciĂłn. Unos duran minutos. Otros, dĂas. Otros, semanas y otros, años.
La ciencia está quitando emociĂłn a la magia. En unos años los aparatos electrĂłnicos podrĂan disolverse en agua. Esto se consigue utilizando una tecnologĂa biodegradable, con las mismas capacidades que la convencional, pero que desaparece al introducirla en lĂquido. Esta tecnologĂa, llamada Transient Electronics, acabarĂa con las montañas de basura que generan los dispositivos desechados y abre nuevas oportunidades a la medicina.
El director de la investigaciĂłn, John A. Rogers, dijo en una entrevista con News Bureau que “desde los primeros tiempos de la industria electrĂłnica, uno de los objetivos clave del diseño ha sido construir dispositivos que duren para siempre. Pero si piensas en la posibilidad contraria (aparatos creados para desaparecer fĂsicamente de una forma controlada y programada), surgen nuevas aplicaciones”.
El grupo de investigaciĂłn ha construido transistores efĂmeros, diodos, sensores de presiĂłn y temperatura, fotodetectores, celdas solares, antenas y osciladores de radio, y cámaras digitales.
Estos dispositivos están encapsulados en seda. Aunque su estructura no es siempre igual. El equipo ha trabajado en distintas estructuras de seda en funciĂłn del tiempo que quieren que perdure antes de su disoluciĂłn. Unos duran minutos. Otros, dĂas. Otros, semanas y otros, años.
Todo parece genĂ©ticamente creado para ser efĂmero, a excepciĂłn de la estupidez humana, que es eterna, cĂcicla y tendente siempre a la superaciĂłn por aquellos individuos que pelean encarnizadamente por ser recordados como “los más estĂşpidos del universo”. Porque los tontos, como escribĂa Carlo M. Cipolla, pueden arruinarte la vida.
Los avances en el campo de la medicina, con esos dispositivos biodegradables mejorarĂan la calidad de vida de los pacientes, abaratarĂa los costes – y ese es el caballo de batalla de los recortes en I+D y de la fuga de investigadores: los recortes en la investigaciĂłn y educaciĂłn son un respiro a muy corto plazo y una condena para la sociedad y el paĂs a medio y largo plazo…claro que vista la miopĂa de los gobernantes y su mal graduada presbicia, no aciertan ni a corto plazo, pero ese es otro tema -.
Toda investigaciĂłn encaminada a avanzar, a mejorar, a hacer que la gente viva mejor, lo que equivale a decir que viva con menos angustia, incertidumbre y sufrimientos es la que verdaderamente tiende a servir a la Humanidad.
Cualquier otra acciĂłn u omisiĂłn que Ăşnicamente sirva para generar pingĂĽes beneficios a unos pocos a costa de la miseria del resto no merecerĂan ni una sola lĂnea y sĂ todas las reprobaciones posibles.
Al fin y al cabo, el consumidor posee el arma definitiva contra el abuso. Lástima que se deje deslumbrar con unas cuantas bagatelas y no vea más allá.
Aunque todo puede cambiar…y de hecho, está cambiando.
Comentarios cerrados.