Hacemos un rápido repaso por algunos de los trucos a los que recurrÃan nuestros antepasados:
En las casas del antiguo Egipto era habitual colgar esteras y mojadas en las puertas. Al soplar el aire, la humedad desprendida refrescaba el ambiente.
Los abanos, una especie de abanicos gigantes que se colgaban del techo, eran los ventiladores de los más pudientes en la India y algunos paÃses árabes. Los criados se encargaban de moverlos mediante un sistema de poleas.
 Ya en el 2000 a.C. los chinos conocÃan los helados. Gracias a Marco Polo, el resto del mundo descubrió su receta a partir del siglo XIII.
 Es al  ingeniero estadounidense Schuyler S. Wheeler, aprendiz de Edison, al que debemos el ventilador moderno. Fue en 1882 cuando ideó un pequeño dispositivo capaz de convertir de mover el aire para refrescar el ambiente.
Hacemos un rápido repaso por algunos de los trucos a los que recurrÃan nuestros antepasados:
En las casas del antiguo Egipto era habitual colgar esteras y mojadas en las puertas. Al soplar el aire, la humedad desprendida refrescaba el ambiente.
Los abanos, una especie de abanicos gigantes que se colgaban del techo, eran los ventiladores de los más pudientes en la India y algunos paÃses árabes. Los criados se encargaban de moverlos mediante un sistema de poleas.
 Ya en el 2000 a.C. los chinos conocÃan los helados. Gracias a Marco Polo, el resto del mundo descubrió su receta a partir del siglo XIII.
 Es al  ingeniero estadounidense Schuyler S. Wheeler, aprendiz de Edison, al que debemos el ventilador moderno. Fue en 1882 cuando ideó un pequeño dispositivo capaz de convertir de mover el aire para refrescar el ambiente.